Asesoría energética, la clave para el ahorro de consumo eléctrico
El gran caballo de batalla es conseguir minimizar lo máximo posible el consumo de energía; es lo que denominaríamos eficiencia energética, cuyo objetivo, es el de conseguir el mismo servicio, utilizando la menor cantidad posible de suministro eléctrico; un objetivo que consigue dos cosas muy importantes, por un lado, ahorro de consumo eléctrico en los hogares y en las empresas, y por otro lado, un ahorro de energía.
Minimizar la cantidad de energía es fundamental, habitamos un planeta cuyos recursos no son ilimitados, con lo cual, hemos de aprender a aprovechar esta energía, usando simplemente la necesaria y evitando malgastarla, algo que no solo es negativo para nuestro bolsillo, sino también para la economía global, y por supuesto y más importante, aumentamos significativamente la presencia de estos gases altamente nocivos para la atmósfera, contribuyendo al deterioro cada vez más rápido del planeta.
Todos, más o menos, tenemos algunas ideas y pequeñas soluciones para el ahorro de consumo eléctrico y, tanto empresas como particulares, se sirven de estos consejos para ahorrar en la factura de la luz lo máximo posible. Sin embargo y, a pesar de ello, no conseguimos economizar todo lo que realmente se podría. Por ello, el papel de una asesoría energética es clave para lograr la ansiada eficiencia energética. Los profesionales del sector son quienes dominan las técnicas y tienen las herramientas para el ahorro de luz en empresas y el ahorro de consumo eléctrico en los hogares.
Un consultor o asesor energético es quien tiene los conocimientos sobre el ahorro de energía; son profesionales cualificados que, tras realizar un análisis y estudio de nuestra vivienda, en el caso de personas particulares, o de la empresa, nos informará de las pautas y/o medios de los que podemos hacer uso para lograr el ansiado y necesario ahorro de energía y por tanto, ahorrar en la factura de la luz y contribuir a mejorar la salud del planeta, al mismo tiempo que aportamos nuestro grano de arena en la temida desaparición paulatina de los recurso naturales para la producción de energía.
La factura de la luz para las familias de Gran Canaria, como ocurre con el resto de comunidades de España, supone un alto desembolso económico que, en más ocasiones de las que nos gustaría, resulta difícil de afrontar. Cuando hay un problema, hay que buscar soluciones y las soluciones, en este caso en particular, vienen de la mano de expertos asesores en energía y en todo lo que tiene que ver con el ahorro de consumo eléctrico.