Cómo prevenir riesgos para trabajos en altura
Las ciudades están llenas de edificios, tantos que a veces parece que lleven allí siglos, todos ellos erigidos del suelo por sí solos como plantas. Pero las cosas no son así y, aunque tengamos el privilegio, por llamarlo de algún modo, de usar esos edificios sin haber tenido que construirlos, resulta que hay profesionales que se encargan de ello. Naturalmente, todo empieza con la fase de diseño, propia de la persona arquitecta, y planificación urbanística, a menudo en manos de alcaldías y gobiernos locales. Pero el trabajo duro de verdad, colocar ladrillo a ladrillo, realizar las instalaciones pertinentes y poner a punto, pertenece a albañiles, fontaneros, electricistas, etc.
Tanto es así, y tal puede llegar a ser el plus de peligrosidad en edificios especialmente altos, que a menudo se vuelve fundamental que los trabajadores de la construcción realicen en algún momento de su vida un curso de especialización. Un ejemplo es el curso de trabajos en altura online, que proporcionará a un trabajador específico herramientas, y no solo teóricas, para trabajar en alto sin que su salud y su seguridad física corran ningún riesgo. No obstante, hay que mencionar que las primeras personas obligadas a especializarse, a seguir formándose y aprendiendo, son aquellas en puestos de responsabilidad, sean capataces, sean empresarios de la construcción.
Para ellos, es decir, los especialistas del último ejemplo, existen también los cursos REA o de recurso preventivo. En general, cualquier tipo de formación en prevención de riesgos laborales es crucial, sin olvidarnos de conocer a fondo las leyes estatales vigentes al respecto. Por añadidura, debemos mencionar los protocolos extraordinarios de seguridad, normalmente fruto de contextos específicos. Las normativas de seguridad frente a contagios derivadas de la pandemia mundial de la COVID-19 son el mejor ejemplo que tenemos ahora.
Pero la formación en general, sea la mencionada, sea un curso de 20 horas de fontanería y climatización, es importante en un trabajo que, ya lo hemos dicho, es duro por definición. Entrar en los edificios para vivir en ellos o hacer gestiones es fácil, lo difícil es levantarlos de cero. Gracias a estos profesionales, están ahí.